Saturday, March 28, 2009

Réquiem por un pollófono.


Víctima circunstancial del exilio propio del R5 -o R6 como le conocen todos fuera de casa- solamente me encuentro con los amigos por el siempre impersonal messenger y sucedáneos. Así, una vez encendidos nuevamente los voraces electrónicos después de "la hora refrescante del planeta" me encuentro con el buen Emilio, quien me hizo el favor de devolverme al caído en desuso y casi olvidado pollófono. Alegre instrumento de comunicación, quien junto a sus parientes columbiformes, las señales de humo y las diligencias han sido sustituídas por el ordinario teléfono. Un pollófono nunca hubiera permitido las llamadas en domingo a las 7 de la mañana de parte de una agencia de cobranza insistente en reubicar a un deduor desconocido en mi propia casa, su alegre quiquiriquí fue un placer campestre en esta ciudad de los baches, vochos, pachucos, cholos y chundos! Pero ya no se los encuentra por ninguna parte. Adiós al pollófono, yo por mi parte hay ésos días en que me resisto a la modernidad y prefiero enterarme de las novedades bien pertrechado en mi atalaya...

1 comment:

Anonymous said...

Y por que no? Un pollofono tampoco permitiria la burla sentimental de los amigos triturados con guitarra y cenas en la mano, con anillos encapsulados, con canciones de arrabal en pleno centro de tlalpan cuando el corazón roto late tambaleante a punto de mentar madres, aventando piedras para golpear al viento, justificando la traición por el destiempo y culpandose de haber llevado meses antes un chelo en el lomo de la camioneta vendida para el viaje en pleno cambio de estación , mal negocio una mujer por un papel, mal negocio la mujer que se va por papel, buen desengaño, buen retorno del chelo, buen retorno de anillos encapsulados sin abrir ni mostrar lo no mostrados bajo cigarros olvidados, en momentos solitarios donde brilla más la luna que el sol. donde la letra profunda cae en rimas de alumno de primaria, y la burla dice pata cuando la fisica se fue. En automatico y sin pensar la escritura del cha cha cha.

Don Gabo regresa al blog que el publico aclama por algo feliz y no quiere esperar a la soledad que parece ahora si no llegará.

chau

Flaco